En este hermoso día deseo compartir con ustedes estas reflexiones cristianas que son acerca de cuando nosotros iniciamos a creernos más que los demás, es decir, tener ese complejo de superioridad.
Lo cierto es que nosotros ante los ojos del Señor todos somos iguales, aunque no lo vamos a negar cada uno de nosotros ha sido dotada con diferentes capacidades, actitudes y cada uno de nosotros hace una búsqueda en su interior cuenta con un don o una capacidad especial para hacer algo de manera extraordinaria.
Creo que es muy importante practicar la humildad aún cuando nosotros hayamos sido bendecidos con muchos bienes o digamos que tenemos un cierto nivel de inteligencia por arriba del promedio normal. Darle la gloria y la obra del Señor por cada uno de nuestros logros.
Imaginémonos que nosotros estamos en buenas condiciones económicas muy buenas en este momento, podemos aprovechar para decirle a las personas que lo que nosotros hemos logrado es gracias a las bendiciones del Señor, en ningún momento utilizar esa condición para poder mirar de menos a los demás, para creerse muy por arriba de ellos, ya que únicamente nosotros conocemos a nuestro presente pero desconocemos cuál es nuestro futuro, por eso lo mejor es nunca creerse mas que otras personas.
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