Una excelente frase cristiana que les estamos presentando en este día: las mejores batallas se ganan de rodillas. No necesariamente me estoy refiriendo a una batalla en una guerra.
Me estoy refiriendo a esas batallas espirituales que cada uno de nosotros nos enfrentamos, como por ejemplo las tentaciones que vienen a nuestra vida, las personas complicadas con las cual es a lo mejor nos tocan convivir en el trabajo o en algún lugar, los inconvenientes e imprevistos que suceden, las enfermedades que llegan a nuestra vida i la de nuestros seres queridos.
Nosotros podemos parecer personas muy fuertes, como que todo lo podemos, pero por nuestras cuentas sin duda alguno somos limitados tenemos un límite de cuánto podemos soportar de cuánto podemos hacer.
Todo es diferente cuando nos agarramos de la mano de Dios, cuando nos acercamos con humildad y nos pedimos que nos ayude, cuando nos quebrantamos de todo corazón y nos arrepentimos de todos los actos malos que hemos hecho en el pasado.
Cuando vemos la respuesta favorable por parte de Dios y nos damos cuenta de que el amor de Dios es maravilloso, si entendemos que las mejores batallas no las ganamos con nuestras propias fuerzas, las ganamos de rodillas ante Dios, porque él es quien nos da la fortaleza y toda su ayuda posible para salir adelante.
Todo esto lo podemos tomar como una bonita reflexión cristiana, se invita a todas las personas a darnos cuenta y entender de una vez que sin Cristo no podemos con todo, solamente cuando nos acercamos a su presencia y pedimos su ayuda es cuando nos da su mano, y nos ayuda a atravesar por medio de todas las circunstancias desfavorables, y podemos salir en victoria.
Es por eso que siempre debemos tener presente al Señor en cada momento de nuestra vida, en casa paso que demos para poder ser fuertes, porque recordemos lo que dice su palabra cuando soy débil entonces soy fuerte.
Compartir en las Redes sociales: